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Una nueva investigación científica liderada por la Dra. Fallon Ana Nacaratte Guajardo ha cuantificado la presencia de microplásticos en aguas embotelladas chilenas, revelando niveles preocupantes en todas las marcas analizadas. El estudio, publicada en la prestigiosa revista Environmental Pollution, ha empleado técnicas avanzadas de microscopía de fluorescencia para identificar y cuantificar con precisión las partículas microplásticas presentes en 12 marcas comerciales de agua embotellada. Los resultados son alarmantes: las aguas purificadas mostraron la mayor concentración de microplásticos, con un promedio de 519 partículas por litro. Este hallazgo cobra especial relevancia al considerar que más del 50% de los microplásticos detectados tienen un tamaño inferior a 20 micrones, lo que plantea serias interrogantes sobre su potencial impacto en la salud humana. Estas diminutas partículas podrían atravesar barreras fisiológicas y acumularse en órganos vitales, generando posibles alteraciones en sistemas como el linfático y el circulatorio. La investigación de la Dra. Nacaratte Guajardo aporta datos cruciales para comprender la magnitud de la contaminación por microplásticos en el Agua embotellada chilena y subraya la necesidad de implementar medidas regulatorias más estrictas para proteger la salud pública y los ecosistemas acuáticos. |
Microplásticos en agua embotellada en Chile: un llamado a la investigación
Si bien el consumo de agua embotellada ha aumentado a nivel mundial como una alternativa percibida como más saludable ante las preocupaciones sobre la calidad del agua potable, un nuevo estudio de la Universidad de Chile revela una realidad preocupante: la presencia de microplásticos en marcas de agua embotellada que se comercializan en la Región Metropolitana de Chile. Si bien aún no se ha establecido una relación directa entre la ingesta de microplásticos y efectos negativos en la salud humana, los autores del estudio enfatizan la necesidad de investigar más a fondo esta problemática. Si bien Chile ha implementado leyes como la Ley REP (Ley 20.920) para la gestión de residuos y la Ley 21.368 que regula los plásticos de un solo uso, es fundamental continuar investigando el origen de la contaminación por microplásticos en agua embotellada e implementar medidas para proteger la salud pública.
Estudio chileno encuentra microplásticos en 12 marcas de agua
En este contexto, pusieron a prueba 12 marcas de Agua embotellada que se distribuyen en la Región Metropolitana, Chile, tanto nacionales como extranjeras. El objetivo de este proyecto Fondecyt, Chile, de postdoctorado fue: "analizar la situación, cuantificar el fenómeno y, de esta forma, contribuir a un problema del que aún se sabe poco y no ha sido abordado desde la política pública. Asimismo, estos resultados pueden contribuir de alguna manera a que las marcas puedan mejorar sus sistemas de producción y envasado", explico la Dra. Nacaratte Guajardo.
Microplásticos detectados en aguas embotelladas de Chile
La presencia de microplásticos de tamaño inferior a 20 micrones en marcas de agua embotellada comercializadas en la Región Metropolitana, es particularmente alarmante dado que estas partículas, comparables en tamaño a un glóbulo blanco, representan más del 50% del total de microplásticos detectados en las muestras. La dimensión microscópica de estos contaminantes aumenta su peligrosidad, ya que facilita su acumulación en el tracto digestivo y su potencial migración a través de los sistemas linfático y circulatorio . Aunque aún no se ha establecido una relación causal directa entre la ingesta de microplásticos presentes en agua embotellada y el desarrollo de enfermedades, la comunidad científica coincide en la necesidad de profundizar la investigación sobre su impacto en la salud humana.
Microplásticos en Chile: del estudio a la política pública
El Dr. Carlos Andrés Manzano Dávila, coautor del estudio comenta que: "Para definir un estándar de política pública de cantidad permitida debería tenerse claro también la conexión entre posibles efectos a concentraciones determinadas, dónde está la línea que marca la diferencia entre que algo sea seguro y que no sea tan seguro. Creo que se necesita un poco más de estudios que hagan esa conexión. Este trabajo abre un poco las puertas a detectar qué productos son los que tienen más cantidades de microplásticos, y eso puede ser un gran inicio, pero definitivamente es insuficiente para establecer una política pública". Además, agrega que: "el principal desafío es identificar cuáles son las cosas donde no es necesario usar plásticos y, en el mismo camino, identificar cuáles son las actividades donde se puede reemplazar, y en aquellas en que no se puede reemplazar tratar de identificar polímeros y materiales que puedan ser inocuos".
Chile: agua potable vs. agua embotellada, un debate necesario
Por último el profesor Manzano manifiesta que: "hay una discusión en varios países de qué tan bueno es en realidad tomar Agua embotellada versus agua potable. Entonces, creo que la mejor aproximación no es pensar en el tipo de material que tiene la botella, sino en garantizar que el agua potable sea buena para el consumo humano y que se reemplace el Agua embotellada. Hay varios países que ya tienen una buena calidad de agua y Chile está dentro de ellos. Ahora, qué alcance tiene esa calidad buena de agua, es otra discusión y debería garantizarse que esta llegue a todas las personas. Pero son ese tipo de soluciones más complejas las que en realidad pueden ayudar a enfrentar este problema".
¿Qué métodos se utilizaron para identificar y cuantificar los microplásticos en el agua embotellada?
Para identificar y cuantificar los microplásticos, se utilizó la microscopía de fluorescencia con tinción de Rojo de Nilo. Esta técnica, empleada para detectar partículas lipofílicas, permite identificar la presencia potencial de microplásticos en las muestras. Aunque este método es útil para un análisis rápido, solo detecta partículas lipofílicas y no determina la composición específica del polímero, de ahí que se hable de "potenciales microplásticos". El estudio midió la concentración de microplásticos en diferentes tamaños: mayores a 50 micrones, de 20 a 50 micrones y de 5 a 20 micrones. La investigación abarcó 12 marcas de agua embotellada, revelando que las muestras de agua purificada presentaban las mayores concentraciones de estos posibles microplásticos.
¿Qué riesgos para la salud se asocian a la ingesta de microplásticos?
La investigación no establece de manera concluyente cuáles son los riesgos para la salud asociados a la ingesta de microplásticos. Sin embargo, se plantea que es un área que requiere mayor investigación. El estudio de la Universidad de Chile, indica que la toxicidad de los microplásticos aumenta en fracciones de menor tamaño. Esto sugiere que podrían desplazarse a través de los sistemas fisiológicos y acumularse en órganos como el hígado y los riñones. Además, se plantea que la acumulación de microplásticos podría generar impactos negativos a nivel celular. Si bien el estudio estima la ingesta diaria de microplásticos a partir del agua embotellada, no afirma que esto represente una amenaza directa para la salud. Sin embargo, se enfatiza la necesidad de seguir investigando este aspecto.
EQUIPO DE INVESTIGADORES
AUTORES | INSTITUCIÓN |
Fallon Ana Nacaratte Guajardo | Departamento de Química, Facultad de Ciencias, Universidad de Chile |
Paula Cuevas | Departamento de Química, Facultad de Ciencias, Universidad de Chile |
Mercedes Becerra-Herrera | Eurofins Iproma |
Carlos A. Manzano |
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